Si tus zapatos de cuero se han dañado o se han estropeado, tranquilo: existen algunas maneras de repararlos de forma fácil, rápida y eficaz. Los zapatos están expuestos a condiciones climatológicas y a terrenos que pueden perjudicar su apariencia, por eso, para conservar al máximo la presencia de esta prenda es importante que conozcas algunos trucos que conseguirán alargar su vida. En este artículo de unComo te contamos cómo arreglar el cuero dañado de los zapatos en sencillos pasos, ¡no te lo pierdas!
Para poder arreglar los zapatos de cuero lo primero es limpiarlos profundamente con agua y jabón para eliminar la suciedad, el polvo y cualquier elemento extraño que se haya quedado impregnado en el zapato.
Una vez lo tengas limpio, tendrás que examinar con detenimiento la rotura del zapato de cuero para determinar si es profundo o superficial. Un corte profundo requiere el uso de una base de tela durante la aplicación. Si la ruptura es tan ancha como el dedo índice, es probable que una base de tela sea necesaria; si aparece más como una grieta, la base no será necesaria.
A continuación rellena el zapato de cuero con papel de periódico o calcetines viejos para mantenerlo rígido durante la reparación. Ahora, corta la tela base en un tamaño ligeramente mayor que la zona dañada; coloca con cuidado la tela base debajo de la lágrima usando pinzas. Si el desgarro es poco profundo, omite este paso.
Para poder arreglar el cuero dañado tendrás que hacer uso de una crema para cuero y aplicarla en la zona de la rotura. Frota con cuidado para intentar eliminar el daño hecho en el material y permite que la crema seque. Para acelerar el proceso, usa un secador de pelo en calor bajo.
Cuando veas que el zapato presenta un mejor aspecto es el momento de darle un buen acabado. Para ello, tendrás que pulir el zapato entero con betún neutro para crear un brillo uniforme; no los uses durante las 24 horas siguientes para conseguir que el material se repare y presente un mejor aspecto.
En este artículo te contamos cómo cuidar los zapatos de cuero para que sepas, de forma general, los cuidados que conseguirán alargar al máximo la vida de tu zapato.
Ten en cuenta que es recomendable que los objetos elaborados con cuero no se expongan nunca directamente al sol porque se resecan y pueden estropearse de nuevo; lo ideal es mantenerlos guardados en una zona seca e interior que protegerán el material de las condiciones metereológicas.
Asimismo, para evitar que el cuero se vuelva a agrietar o a estropear es recomendable que lo limpies de polvo pues, estas motas, podrían dañar la apariencia del zapato y agrietarlo. Por este motivo, guarda tus zapatos cubiertos con una bolsa o en una caja de cartón para que estén protegidos. En este artículo de unComo te damos más consejos acerca de cómo cuidar el cuero.
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- Mantén el cuero humedecido con crema de cuero para evitar más grietas.