Cómo hidratar la piel después de la playa
El verano conlleva unos cuidados específicos para nuestra piel debido a la habitual exposición solar en playas, y es que conseguir el bronceado ideal a veces puede obligarnos a pasar horas en la arena y muchas otras dentro del agua. Sin embargo, los rayos UV pueden ser perjudiciales si nos sobreexponemos al sol o no tomamos las medidas necesarias. La sequedad de la piel es uno de los visibles efectos inmediatos y esta solo puede combatirse rehidratando con cremas, lociones y bebidas hidratantes en cuanto nos hemos duchado y exfoliado correctamente. A continuación, en unComo te mostramos cómo hidratar la piel después de la playa.
Pasos a seguir:
Antes de proceder a hidratar correctamente la piel, se recomienda limpiarla en profundidad para eliminar la sal y otros residuos. Para ello, se recurre a exfoliantes corporales y faciales que se encargan de eliminar las impurezas y células muertas de la piel y que aplicados de forma semanal, permiten una mejor absorción de las cremas y lociones aplicadas posteriormente. Por tanto, se debe exfoliar la piel durante duchas de agua tibia, pues estas ayudan a relajar y humectar todo el cuerpo de forma natural.
En primer lugar, para hidratar la piel tras un día de playa el paso básico es aplicar crema hidratante corporal por todo el cuerpo para nutrirlo y evitar la sequedad que pueda haber provocado el sol. Respecto al tipo de crema, se recomienda utilizar una que contenga elastina además de colágeno para así estimular el crecimiento de estos en nuestra piel, ya que el sol destruye esos componentes y nuestro cuerpo necesita volver a producirlos con normalidad. De esta manera, se combate el envejecimiento prematuro.
Pero no olvidemos que el rostro también debe estar continuamente hidratado. A diferencia del cuerpo, utilizaremos una crema facial específica para el cutis. Si la cara está seca y rojiza tras ir a la playa, es recomendable recurrir a una crema de noche calmante para que, durante las horas de sueño, la piel se nutra y recomponga.
Además de los productos hidratantes, también es importante consumir líquidos para hidratar desde el interior logrando devolver la frescura y elasticidad a la piel.
Uno de los objetivos de ir a la playa es lograr un bonito bronceado, algo que requiere de ciertos cuidados. De esta forma, se recomienda emplear un producto para prolongar el bronceado. Por ejemplo, una loción hidratante con aloe vera puede mantener el bronceado a la vez que evita la aparición de pellejos en la piel provocados por quemaduras. Pero también se alargará el tono dorado con el consumo de zumos de frutas naturales y ciertos alimentos como las zanahorias que aportan brillo y vitaminas a la piel.
Respecto a este último punto, las quemaduras solares pueden tratarse con una crema nutritiva específica para ese efecto, siempre pudiendo acompañar ese producto con la aplicación de bolsas de manzanilla sobre la zona afectada para conseguir aliviar la quemazón o también aloe vera para refrescar la piel. Los productos con este componente son de gran utilidad contra las quemaduras provocadas por el sol, ya que refrescan y alivian fácilmente.
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