Cuando los rayos del sol son más intensos, pueden dañar nuestra piel poco a poco sin que nos demos cuenta, por ello es fundamental cuidarla y protegerla de las radiaciones solares y, todavía más, si cuentas con alguna cicatriz que quede totalmente expuesta al sol. Piensa que este tipo de radiación ultravioleta influye en el proceso de cicatrización directamente y puede provocar alteraciones en el área dañada, desde inflamación hasta aumento de pigmentación o enrojecimiento. Si deseas sanar bien tu cicatriz y que no quede antiestética, no dejes de leer el siguiente artículo de unComo.com. En esta ocasión, te explicamos las claves para que sepas cómo proteger una cicatriz del sol. Cuidar tu piel es muy importante, no pierdas ni un segundo.
Para curar correctamente una cicatriz, debes ser consciente del riesgo que puede suponer su exposición solar. Si ya de por sí los rayos del sol en exceso pueden provocar daños en nuestra piel, con una herida reciente el riesgo incrementa todavía más. Es por ello que es recomendable ocultar una cicatriz del sol, ya que así conseguirás que no se pigmente ni oscurezca, lo cual podría empeorar el resultado estético final de tu piel, una vez la herida haya sanado.
Casi todos tenemos algún tipo de marca o cicatriz en nuestro cuerpo, pero debemos distinguir los tipos:
- Cicatriz hiperpigmentada: de color oscuro, dado el exceso de producción de melanina. Son las cicatrices más superficiales.
- Cicatriz hipopigmentada: de aspecto blanquecino, ya que se ha impedido la producción de melanina en la zona.
- Cicatriz atrófica: cicatrices profundas, similares a un agujero, dada la pérdida de tejido.
- Cicatriz hipertrófica: acumulación de tejido dérmico. Son habituales heridas traumatológicas y quirúrgicas.
- Queloides: ocupan mayor superficie que las hipertróficas.
Ahora que ya sabes cuál es el tipo de cicatriz que tienes, es importante que la cuides y la protejas del sol, si quieres que sane adecuadamente y no se convierta en una marca antiestética.
Existen múltiples apósitos que ayudan a la protección de la cicatriz y la alejan de la exposición solar. Consulta en tu farmacia cuáles son los más resistentes al agua y cuáles tienen mayor durabilidad. El uso de estos protectores (sean apósitos o vendajes) es primordial para asegurar la sanación de tu cicatriz y evitar que los rayos solares provoquen cambios en su textura o coloración.
Otra opción para proteger tu cicatriz de los rayos del sol es utilizar crema solar con alto factor de protección. Es importante usar los protectores solares siempre, pero deberás aumentar su uso si tu cicatriz queda expuesta al sol de manera directa. Recuerda siempre utilizar cremas de máxima protección para evitar que el aspecto de la cicatriz empeore, se pigmente y acabe viéndose más y más antiestética. En el siguiente artículo, puedes ver algunos consejos para elegir la crema solar correcta.
Debes tratar adecuadamente cada tipo de cicatriz para conseguir que se cure y que no deje casi huellas de tal herida en tu piel. Recuerda que puedes usar apósitos y vendajes para cubrirla, así como cremas de protección solar de máximo factor. No obstante, lo mejor para evitar el riesgo de que el sol dañe tu cicatriz, será evitar su exposición todo lo que sea posible. Y recuerda consultar siempre con tu médico o farmacéutico, él te recomendará los mejores productos para sanar tu cicatriz.
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