La depilación es algo que todas debemos poner en práctica si deseamos lucir una piel más lisa, sedosa y sin rastro del antiestético vello. Son muchos los métodos a los que podemos recurrir para depilarnos nosotras mismas en casa, pero para obtener buenos resultados es imprescindible hacerlo correctamente y no caer en prácticas inadecuadas que pongan en riesgo la salud y el buen aspecto de nuestra piel. En el siguiente artículo de unComo te mostramos los errores más comunes en la depilación, ¡evítalos para lucir una piel hermosa y radiante!
Depilarse el día de un evento importante.
Es uno de los errores más comunes que cometen las mujeres en la depilación. Si tienes un evento especial, ya sea una boda, una comunión, una cita o reunión importante procura no depilarte ese mismo día. Corres el riesgo de que tu piel luzca enrojecida e irritada. Además pueden aparecer granitos y heridas en caso de optar por la rasuración. Evítalo depilándote dos días antes del evento y te asegurarás de estar perfecta para la ocasión.
Exponer la piel recién depilada al sol.
Depilarse en el último momento y justo antes de exponerse al sol es otro de los errores frecuentes que dañan el estado natural de la piel. Los efectos negativos de los rayos UV afectan mucho más a la piel sensible recién depilada, provocando una mayor irritación de los poros. Te aconsejamos que realices la depilación la noche anterior para que la piel se pueda recuperar por completo.
Rasurarse a primera hora de la mañana.
En las primeras horas del día y justo al despertar, determinadas zonas del cuerpo como las piernas se encuentran más hinchadas de lo habitual por la retención de líquidos y, por ello, la rasuración del vello no es tan efectiva. Para no cometer este error en la depilación, es preferible rasurar el pelo por la tarde o por la noche.
No exfoliar la piel antes de la rasuración.
Depilarse con cuchilla sin antes haber exfoliado la piel aumentará las probabilidades de que aparezcan los indeseados vellos encarnados. Por el contrario, con la exfoliación eliminas células muertas e impurezas logrando una depilación impecable y más duradera.
Aplicar la cera muy caliente.
Este uno de los errores comunes en la depilación más peligrosos que se cometen. Aplicar la cera cuando aún está muy caliente puede ocasionar quemaduras graves y sequedad. Es importante esperar a que la cera tenga una temperatura óptima para extenderla sobre la piel y comprobarla previamente aplicando un poco en el dorso de la mano. Consulta el artículo Cómo depilarse con cera para hacerlo de forma correcta y segura.
Usar una rasuradora demasiado gastada.
Utilizar la misma cuchilla una y otra vez es un gran error que debes evitar si no quieres dañar tu piel y sufrir muchos más cortes y heridas. Procura secar muy bien el cabezal de la cuchilla justo al finalizar la depilación y cambiarlo por uno nuevo cada tres o cuatro usos como máximo. Y, sobre todo, nunca compartas cuchilla con otra persona.
No hidratar la piel después de la depilación.
La eliminación del vello en cualquier zona del cuerpo y, sobre todo, en aquellas más sensibles como las ingles o las axilas, suele provocar que la piel empiece a estar más irritada, enrojecida y con granitos. Por ello, nunca olvides hidratar la piel tras la depilación, sea cual sea el método empleado, aplicando una loción o crema que mantenga la zona bien nutrida y calmada.
Dejar que los pelos crezcan en exceso.
Entre los errores comunes en la depilación también se encuentra dejar que el vello sea muy largo para eliminarlo con cera. Contra más longitud y grosor tenga el vello, mayor será el dolor en el momento de la depilación y, en lugar de arrancarlo de raíz, corres el riesgo de que gran parte del pelo sea cortado y no puedas disfrutar de una depilación duradera.
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